RADIO AMÉRICA._ Ante la drástica reducción de la financiación humanitaria mundial, las Naciones Unidas asignó hoy 110 millones de dólares del Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia (CERF, por sus siglas en inglés) para reforzar la asistencia vital en 10 de las crisis más desatendidas y con menos financiación del mundo en África, Asia y América Latina. De estos Honduras recibirá 5 millones de dólares para la implementación del Plan de Respuesta Humanitaria 2025, lanzado por el Gobierno y la Red Humanitaria de Honduras el pasado 18 de febrero.
Contexto y Asignación Global
Más de 300 millones de personas en todo el mundo necesitan ayuda humanitaria urgente, pero la financiación ha ido disminuyendo cada año, y se prevé que los niveles de este año caigan a un mínimo histórico.
«Para los países azotados por los conflictos, el cambio climático y las turbulencias económicas, los brutales recortes de financiación no significan que desaparezcan las necesidades humanitarias», declaró Tom Fletcher, Secretario General Adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia. «La asignación de fondos de emergencia de hoy canaliza los recursos rápidamente hacia donde más se necesitan».
Un tercio de la nueva financiación del CERF se destinará a Sudán, que se enfrenta a la violencia, los desplazamientos y el hambre, y al vecino Chad, adonde han huido muchas personas. Los fondos también reforzarán la respuesta humanitaria en Afganistán, la República Centroafricana, Honduras, Mauritania, Níger, Somalia, Venezuela y Zambia. Además, apoyarán iniciativas vitales para proteger a las personas vulnerables de las crisis climáticas, gracias a la Cuenta de Acción Climática del CERF.
CERF
Dos veces al año, el CERF -el fondo mundial de emergencia de la ONU gestionado por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios- asigna recursos para emergencias con financiación insuficiente como alerta mundial para poner de relieve la necesidad de financiación adicional por parte de los Estados miembros, el sector privado y otros. A finales de 2024, se desembolsaron 110 millones de dólares para ayudar a más de 3 millones de personas en emergencias con financiación insuficiente en Burkina Faso, Burundi, Camerún, Etiopía, Haití, Malawi, Malí, Mozambique, Myanmar y Yemen.
Este año, la comunidad humanitaria busca casi 45 billones de dólares para llegar a 185 millones de las personas más vulnerables atrapadas en crisis en todo el mundo. Hasta la fecha, sólo se ha recibido el 5% de esta financiación, lo que deja un déficit de más de 42 billones de dólares.
El CERF es uno de los instrumentos de financiación más rápidos disponibles para ayudar a las personas afectadas por crisis. Gestionado por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas en nombre del Secretario General de las Naciones Unidas, el CERF permite una acción humanitaria oportuna, eficaz y que salva vidas por parte de los organismos de las Naciones Unidas y otros, para poner en marcha o reforzar las respuestas de emergencia en cualquier lugar donde se necesiten. Las decisiones de financiación para emergencias con financiación insuficiente se basan en un análisis detallado de más de 90 indicadores humanitarios y en una amplia consulta con los socios.
Creación
Desde su creación por la Asamblea General de la ONU en 2005, y con las generosas contribuciones de 130 Estados miembros y observadores, así como de otros donantes, incluidos particulares, el CERF ha ayudado a cientos de millones de personas con unos 9.6 billones de dólares en más de 110 países y territorios. Esto incluye 3.3 billones de dólares a crisis con financiación insuficiente. El CERF tiene un objetivo de financiación anual de 1 billón de dólares.
El CERF es el principal instrumento mundial de financiación humanitaria para responder a las emergencias humanitarias relacionadas con el clima. Para reforzar esta función, el CERF lanzó su Cuenta de Acción Climática en la COP28, ofreciendo una vía rápida, eficiente y de impacto para la financiación humanitaria relacionada con el clima. Su objetivo es ayudar a las comunidades más vulnerables del mundo que se enfrentan a las consecuencias de la crisis climática, incluso a través de acciones anticipatorias y proyectos que salvan vidas y que también fomentan la adaptación y la resiliencia de las personas.
Honduras
En Honduras, la asignación es de US$5 millones, la cual marca el primer aporte al Plan de Respuesta Humanitaria 2025 que requiere US$138,5 millones para atender a 800 mil personas en necesidad en 118 municipios del país.
El Coordinador Residente de Naciones Unidas en Honduras, Alejandro Álvarez, destacó que “el CERF es instrumental para el Plan de Respuesta Humanitaria, porque es un catalizador para que otros donantes se sumen, pero también porque maximiza nuestro impacto y muestra al Gobierno que sus esfuerzos van en la dirección correcta junto a nosotros”.
El Plan se basa en el Panorama de Necesidades Humanitarias, el cual destaca que estas necesidades surgen a partir de tres ejes principales los cuales son Fenómenos climáticos, Los impactos humanitarios de la violencia, incluyendo a las poblaciones más vulnerables, como ser mujeres, niñas, niños, pueblos indígenas y afrohondureños, personas con discapacidad y personas LGBTBIQ+ y Los movimientos mixtos y el impacto por el ingreso, tránsito y salida de personas refugiadas y migrantes integrantes de movimientos mixtos, incluyendo personas retornadas.
En este sentido, la Red Humanitaria de Honduras, liderada por la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (COPECO) y Naciones Unidas y compuesta por más de 70 organizaciones nacionales e internacionales, prevé ejecutar, a través del financiamiento del Plan, 83 proyectos distribuidos en 8 sectores y dos subsectores: seguridad alimentaria; protección (incluyendo violencia basada en género y protección de la niñez); agua, saneamiento e higiene; salud; coordinación y gestión de albergues (CCCM por sus siglas en inglés); nutrición; educación; y coordinación.
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