Radio América. Con poca afluencia de personas por la covid-19, la Iglesia Católica celebra hoy otro atípico Domingo de Ramos con una misa presidida por el rector de la Basílica Menor de Nuestra Señora de Suyapa, Carlo Magno Núñez.

El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa, es una celebración cristiana que conmemora la entrada triunfal de Jesús en la ciudad de Jerusalén, cuando una multitud de habitantes lo recibió como el Mesías e hijo de Dios.
En el país ha perdurado la tradición en la que miles de familias asisten en esta fecha a misa desde horas tempranas y regresan a sus hogares con un ramo de olivo, un símbolo de la bendición de Dios, protección y ayuda, además, la tradición indica que este debe colocarse sobre un crucifijo o cuadro religioso para recordar que se trata de algo sagrado.
Al igual que el año pasado, no se celebrarán las tradicionales procesiones del Jueves Santo y el Domingo de Resurrección debido a la pandemia de la covid-19 que ya deja 4,557 muertes y 187,015 contagios en Honduras.
La pandemia reduce ventas de palmas
La pandemia de covid-19 que afecta a Honduras desde marzo de 2020 ha reducido este año las ventas de tiras palmas para su bendición el Domingo de Ramos en los templos católicos.
La venta de palmas es una vieja tradición en muchos de los templos católicos de Honduras, marcada por decenas de campesinos, entre hombres, mujeres y niños que llegan desde comunidades rurales del país.