Radio América. Cuando se trata de perseguir los sueños o el elegir una profesión, el ser mecánica sigue siendo considerado algo poco convencional para una mujer, esto por los estereotipos que existen en la sociedad, asumiendo que no es trabajo para ellas, pues Meylin Carolina Hernández demuestra que ese prejuicio es erróneo.

Con la ayuda de su madre la joven catracha ha logrado salir adelante y cumplir el sueño de convertirse en una de las mejores en este oficio.
Este talento lo heredó de su padre ya fallecido. Actualmente trabaja como ayudante de mecánica en un taller automotriz, generando así, un ingreso económico para su madre.
La adolescente sueña con ser una prestigiosa Ingeniera Industrial y cada día trabajo fuertemente para poder lograrlo.
Meylin nos comparte un poco de su historia a través de cortometraje realizado por Punto Joven: