Radio América. La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, le declaró este jueves la guerra al flagelo de la extorsión y anunció emergencia nacional en materia de seguridad en el marco del lanzamiento del plan integral para el tratamiento de la extorsión y delitos conexos.
Inicialmente la mandataria de la nación dijo que en los últimos 12 años el pueblo hondureño fue víctima de la imposición de un cártel de narcotráfico desde el Estado mismo, un cártel que permeó las instituciones, las estructuras policiales y militares elevando sin límites la violencia, extorsión y la formación de organizaciones criminales producto de la impunidad en la que han vivido estos grupos que ampliaron sus alcances.
En su disertación, Castro manifestó que es un delito olvidar los hechos trágicos que han hecho llorar y sufrir tanto al pueblo hondureño.
Expuso que la extorsión es el resultado siniestro de la existencia del crimen organizado en Honduras, que está asentada en diferentes áreas del país, y que es una de las principales causas de inseguridad, migración, desplazamiento, pérdida de libertad, muertes violentas y cierre de pequeños y medianos negocios.
Con la estrategia integral contra la extorsión y delitos conexos anunciada hoy por la Policía Nacional, «este gobierno del socialismo democrático le declara la guerra a la extorsión así como desde el primer día le declaramos la guerra a la corrupción, impunidad y narcotráfico», externó la máxima autoridad del país.
La titular del Ejecutivo aseguró que su compromiso es brindar toda la seguridad que demanda el pueblo hondureño y retornarle la dignidad perdida en el gobierno anterior.
«La Policía Nacional cuenta con todo mi apoyo, cuenta con todo el apoyo para combatir el crimen, la extorsión, el narcotráfico y desarticular las organizaciones criminales hasta identificar y capturar a los cabecillas de cuello blanco. Vamos a erradicar la extorsión hasta en el último rincón de nuestra patria», prometió.
En materia de seguridad, anunció que se contará con un sistema de investigación e inteligencia financiera para el rastreo, detección y desactivación de lavado de capitales y activos provenientes del crimen organizado transnacional y nacional.
Castro exhortó a la Policía Nacional a recuperar en el menor tiempo posible los espacios públicos controlados por el crimen organizado y sus pandillas.
En ese sentido, para fortalecer la estrategia de recuperación inmediata de los territorios, determinó declarar emergencia nacional en materia de seguridad e instruyó a la Policía Nacional que por medio de sus evaluaciones comunitarias procedan a proponer los estados de excepción y suspensión de garantías constitucionales parciales en las áreas que ameriten.